Una alimentación sana y equilibrada requiere el consumo de grasas pues el cuerpo humano necesita de estas para la síntesis de hormonas, para la absorción de algunas vitaminas, para darle estructura a las células y regular el metabolismo. Las grasas saludables se encuentran en alimentos como aguacates, nueces, semillas y aceites de oliva y pescado graso, son esenciales para la salud y deben incluirse en una dieta equilibrada.
Por otro lado hay algunas grasas que deberían ser evitadas como las grasas saturadas y las grasas trans. Las grasas saturadas se encuentran en productos de origen animal como carnes, embutidos y derivados de la leche, un consumo excesivo delas mismas se asocia el riesgo de enfermedad cardiovascular. Las grasas trans se crean mediante un proceso de hidrogenación industrial de los aceites vegetales líquidos para convertirlos en grasas sólidas, se encuentran en alimentos procesados y también han demostrado aumento del riesgo de enfermedad cardiovascular.
Llevar una alimentación balanceada tiene un rol preventivo fuerte en la prevención de complicaciones cardiovasculares, en la aparición de patologías metabólicas como la diabetes, el hígado graso, la obesidad y problemas asociados al colesterol. Asesórate siempre de un experto, en SINCRO tu salud también es nuestra prioridad.
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